La falta de mantenimiento puede tener efectos nocivos para su salud y para el equipamiento de la piscina.
- Un pH mal ajustado, por ejemplo, irrita la piel y disminuye la eficacia del desinfectante.
- La falta de desinfección del agua estimula la proliferación de bacterias peligrosas para la salud y para el equipamiento de la piscina.
- Las algas tiñen de verde el agua y dañan los revestimientos.
- Las incrustaciones de cal pueden hacer que las paredes vuelvan ásperas y deteriorar la filtración.
Si quiere aprovechar al máximo su piscina y disfrutar de un agua cristalina y saludable durante toda la temporada, debe seguir unas reglas simples para garantizar la depuración física y química del agua.
